Cuando el salario monetario no lo es todo

Bajo el planteamiento introductorio es donde toma relevancia el salario emocional. Para las nuevas generaciones el salario monetario ya no es el único factor toman en cuenta para decidir en donde trabajar y decidir si permanecer trabajando para la misma empresa.

Además de la retribución económica, existen otros factores clave para crear estos “vínculos emocionales” que benefician tanto a las empresas como colaboradores. Ya que hoy en día un bueno sueldo no equivale a sentirse pleno en el ámbito laboral.

Existen diversos elementos que ayudan a crecer personal y profesionalmente y no se relacionan directamente con un sueldo monetario. Se trata de otros beneficios al colaborador que tienen un impacto directo en la calidad de vida.

Por tanto, el salario emocional se puede definir como aquellos beneficios no económicos cuyo fin es satisfacer las necesidades personales, familiares y profesionales del colaborador, mejorando así su calidad de vida.

Investigaciones han confirmado que ofrecer un salario emocional tiene un impacto directo en los niveles de productividad de los colaboradores El estudio State of The Global Workplace realizado por Gallup lo confirma, un mayor compromiso de los colaboradores representa un aumento del 21% en la rentabilidad y 17% en la productividad de la empresa.

Adicional el estudio menciona que el score de compromiso y evaluación de vida (Engagement and Life Evaluation) fue de 23% y 43% respectivamente, siendo de los scores más bajos a nivel mundial. Existiendo una gran oportunidad para mejorar, y esto se puede logar a través del salario emocional.

De acuerdo con un estudio realizado por Randstad los factores más importantes que buscan los colaboradores en México son:

• Crecimiento profesional (66%)
• Salario y prestaciones activas / beneficios extra (65%)
• Ambiente laboral agradable (64%)
• Seguridad laboral (61%)
• Balance entre vida personal y trabajo (53%)

Tomando en cuenta el último punto, lo que los colaboradores valoran más para poder tener ese balance entre vida personal y trabajo es:

• Ofrecer opciones de trabajo flexible (45%)
• Ofrecer desarrollo profesional (39%)
• Ofrecer compensaciones más allá del salario (39%)
• Ofrecer prestaciones de salud (39%)
• Ofrecer capacitación y desarrollo (38%)

Ofrecer beneficios a empleados (38%)Todo esto se puede obtener a través del salario emocional, algunos beneficios que ofrecer este tipo de salario conlleva son los siguientes:

• Mayor implicación / compromiso laboral
• Contribuye a un mejor ambiente laboral
• Aumento de productividad
• Mejora el bienestar de los colaboradores
• Previene sentimientos relacionados al agotamiento laboral
• Atracción y retención de talento
• Disminución rotación laboral

No es un secreto que las empresas hoy en día necesitan recurrir a este tipo de salario para poder mejorar el bienestar de sus colaboradores y lograr todo lo anterior. Pero lo que es esencial para que en verdad funcione y tenga un impacto es NO hacer un plan único para todos por igual.

Lo que se necesita es entregar ese salario emocional dependiendo de lo que necesita cada colaborador, en base a las metas, necesidades, intereses y sentimientos individuales.Solo así los colaboradores podrán sacar el máximo provecho de todos los beneficios, y las empresas podrán maximizar la usabilidad y ROI de lo que están ofreciendo.

Como dice Marisa Elizundia, especialista en Recursos Humanos: El salario económico es la base, pero hay que sumar a esa ecuación todo lo demás, todos aquellos elementos que te ayudan a crecer personal y profesionalmente.

"Invertimos un tercio de nuestras vidas en el trabajo y no podemos pensar en ello solo en términos económicos. Sí, trabajas por dinero, pero si quitas la parte económica, ¿con qué te quedas? ¿por qué trabajas?", reflexiona la especialista.